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viernes, 19 de febrero de 2010

Parece que se cumple lo dicho

Bueno vuelvo a abrir un episodio más del culebrón de los "cortitos". En el fondo parece que ha sido inteligente y se ha marchado, al ver que no daba lo que debía ofrecer. Sí, hablo de Diego Rodríguez que ha abandonado el banquillo del primer filial. En su momento dije que lo ilógico era que un entrenador que había estado dos años llevando al primer equipo de juveniles a la final de la copa del Rey, se viera por el tema amiguitos relegado a llevar al segundo filial (Sevilla C), teniendo a favor que conocía a todos los jugadores a la perfección y además con mayor experiencia en los banquillos sevillistas y en la organización de la cantera del club. Y de esta manera, fuera relegado de la opción Sevilla At. por la política de la camarilla de Jiménez, Ramón y el inestimable apoyo de Monchi.

Yo también soy sevillista, y no me considero menos que estos últimos, pero si mi amigo no está al nivel de lo que exige mi club... seguro que no debe ser mi apuesta. Y aquí había unos condicionantes que eran decisivos para que no hubiese pasado lo que ha pasado; el primero EXPERIENCIA, y en el caso de Diego además conocimiento de los escalafones inferiores e incluso de la categoría. Espero que le haya servido de aprendizaje y que lo continúe en otros clubes. SUERTE. Por todo lo que entregaron al club siendo futbolistas, yo siempre les desearé lo mejor. Ahora coge las riendas del equipo Tejada, deseo que demuestre todo lo que puso en liza con estos jugadores años atrás.

Al final se demuestra que no vemos las cosas de una forma rara, y que lo evidente no se puede ocultar. Jiménez no se ha portado bien con gente como Antonio Alvarez (porque ese sí que conocía al primer equipo con perfección tras dos etapas importantes Caparrós y Juande) ni con Carvajal, ni con algún otro del plantel técnico anterior; cambiándolos por gente de su confianza sin el bagaje de los mencionados, al igual que él. Pero la vida pone a todos en su sitio. Yo no digo que unos sean los buenos y otros los malos, pero las evidencias de lo acontecido están ahí, La limpieza de personal, bajo la supervisión del mister, se hizo y la justificación no podía ser que unos fueran más sevillistas que otros, ni incluso que no se conocieran, porque todos llegaron a jugar juntos alguna vez.

De nuevo tiempo al tiempo.

Coehlo.

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